Durante la celebración del IV Centenario de la Muerte de Santa Teresa (1981-1982), Jerónimo colabora con el delegado diocesano, D. José Sánchez Vaquero en la realización de numerosas obras destinadas a la promoción de Santa Teresa, la Basílica y Alba de Tormes. El artesano realiza restauraciones en las capillas de la basílica, indicadores y pancartas en la villa.
Destaca un gran cartel de varios metros con el “recinto teresiano” con el plano de la villa y sus principales monumentos, como orientación para los peregrinos (cartel del que se hicieron tarjetas postales)
Jerónimo elaboró una serie de 17 grandes paneles didácticos sobre las fundaciones de la Santa. “Las Fundaciones” fueron expuestas en la nave principal de la Basílica, siendo un atractivo más para los numerosos visitantes que presencian las obras de la Basílica.
Cada panel está dedicado a uno de los 17 monasterios que la Santa fundó en los
veinte años comprendidos entre 1562 y 1582. Bajo el guión de Sánchez Vaquero,
Jerónimo Cotobal reproduce, por cada una de las fundaciones, un viejo grabado
con la vista general del monasterio, una breve reseña histórica, fotografías,
citas...
Todos los elementos (incluida la tipografía gótica) están elaborados de forma completamente artesanal, dibujados a lápiz y coloreados posteriormente.
Los gastos se sufragan con los donativos recogidos en el cepillo de la maqueta, que pasa a la cripta de la Basílica, de donde se retira por los graves problemas de humedad.
Con la llegada del Papa Juan Pablo II a Alba de Tormes en 1982, hay esperanzas de que el mundo conozca el templo inacabado, pero la apretada agenda del Pontífice no permite que éste se acerque siquiera a la basílica, algo que decepciona profundamente a muchos albenses.
En los prolegómenos del Centenario, Jerónimo realiza, por iniciativa propia, una serie de pequeños carteles enmarcados y coloreados uno a uno con el encabezamiento “No blasfemes” y unos versos de Santa Teresa.
Este cartel que, en forma de bando, firmaba “Teresa de Jesús, alcaldesa de Alba” es regalado por Jerónimo a más de una treintena de establecimientos hosteleros.
Siempre que le fue posible, e invirtiendo medios y esfuerzo sin límite, Jerónimo ha participado en todos las iniciativas de promoción de la Basílica, de Santa Teresa y de su pueblo, Alba de Tormes. Baste como ejemplo el cartel de la campaña ¡Manos a la Obra!, con la que invitaba a todos a sumarse a las tareas de limpieza y continuación de las obras de la Basílica